jueves, 27 de febrero de 2014

Poéticas de manifiesto en Solar

El próximo 6 de marzo de 2014 inauguramos en Solar la segunda exposición temporal que acoge este espacio. Los tres artistas, Acaymo S. Cuesta, Oliver Behrmann y Laura Gherardi, han vertido su sudor, sangre e imaginación al servicio de un esfuerzo común, de una misma filosofía creativa en pos de mostrar y demostrar que es posible una forma diferente de exponer y de generar obra para espacios que suponen un reto. De manifiesto se está convirtiendo en eso, una manifestación de todos los esfuerzos humanos que condensa el proyecto Solar, desde los artistas a las personas que nos ayudan en el montaje y los que tan generosamente contribuyen económicamente.
Por lo que se termina por sentir la necesidad de agradecer de una forma sincera y profunda a esas personas que confían en que el cambio en cultura es posible. Que es posible una nueva forma de acercamiento entre los públicos-ciudadanos y los discursos de los artistas. Desde la calle, desde ese punto descentralizado que es Solar brota esa conexión que nunca debió romperse. Una ciudadanía que dispensa desde el espacio de convivencia que es la ciudad una protección más que loable a este pequeño núcleo radiante.


Por eso hoy les presentamos qué es De Manifiesto, ese crisol de tres poéticas artísticas entre cuerpos, reflejos y posicionamientos. Esto es...
Buscar similitudes entre la ciudad y los cuerpos que la habitan es una exigencia, pues es el cuerpo el elemento que  la recorre. La ciudad como paisaje urbano es habitado y usado por figuras que laten, efímeras y deambulantes. Solar es el entorno ideal para poner en relación estos dos conceptos Urbe/cuerpo, Público/privado. La ciudad como enjambre de calles y manzanas cuyas arterias son de uso público y el cuerpo como la noción de “objeto” privado, de frontera y limitación con el espacio circundante que lo recorre.
La forma de comportamiento del cuerpo en la ciudad es el civismo,  es decir, el respeto que parte de lo privado hacia lo público.  Diferentes disciplinas plásticas dialogan aquí sobre el concepto del reflejo-como elemento cívico de relación con el entorno- y del cuerpo humano –realidad física e íntima del transeúnte- poniendo en relación la imitación plástica haciendo uso de simbolismos como  la naturaleza del cuerpo y su reverberación difusa.
Esta propuesta departe acerca de las relaciones entre los seres humanos cuando se materializan los deseos más íntimos a la vista de los demás –el reflejo como imagen manifiesta o forma de reconocimiento de algo interior-, como una imagen pública de algo que nos era desconocido. Como transeúntes nos tropezamos en Solar, interrumpimos el paseo urbano para ver nuestro propia imagen.
Las formas plásticas deambulan bajo la voluntad de compartir hasta un espacio de encuentro que parte desde lo privado a la generalidad de sentidos, sentimientos y encuentros públicos. Estos reflejos ponen de manifiesto otra cosa diferente al cuerpo situado frente a él. Y Genera una dicotomía entre imágenes reales, capturadas e inventadas, entre la ciudad real y la ciudad ideal, entre el espacio público y cuerpo privado.

lunes, 3 de febrero de 2014

Desayuno Solar. "Gracias por invitarme"


Es obvio que el panorama cultural a nuestro alrededor está sufriendo cambios drásticos. Cambios económicos muy violentos que obligan a tomar las cosas de otra manera, de una forma más responsable, conectada y participativa si cabe. La cultura que se desarrolla en nuestro entorno es la que paralelamente nos va determinando como sociedad, una forma o parámetro que en años venideros será sintomática de nuestras características generacionales.


Ver el vaso medio lleno es una gran virtud y por tanto es de donde podemos sacar lo positivo de la situación. Solar ha demostrado que haciendo hincapié en que no estamos solos, que la cultura no es un laboratorio a puerta cerrada donde conviven artistas, agentes culturales y demás profesionales del medio, sino que la cultura es compartir y colaborar. Servirnos de la ilusión que experimenta una persona cuando se le pide implicación en un proyecto, cuando se desarrolla al lado de su casa y cuando --¿Por qué no?- la temática le toca de lleno, hace que proyectos así no sólo valgan la pena sino que sean totalmente necesarios.
Solar es todo eso, desde el lugar donde ocurren las cosas hasta la financiación para poder desarrollarlas.
Por eso muchas gracias por el Desayuno, por apoyar la iniciativa de Oliver Behrmann de usar cuerpos reales para construir sin artificios unas figuras totalmente conectadas con la ciudadanía, que le servirán a Laura Gherardi de contenedor de sus formas sensibles y que suponen un trampolín a las formas que Acaymo S. Cuesta nos brindará. Muchas gracias por inundarnos con la ilusión de las personas que creen que otro foro de encuentro e intercambio es posible, por compartir una comida y por el honor de poder invitarles.

Fotografía cortesía de Francisco Cuadrado